El futuro del liderazgo sostenible es femenino
08 de Marzo de 2021
08 de Marzo de 2021
La sostenibilidad es sin duda un concepto del cual es difícil apartarnos actualmente, pero, ¿qué quiere decir Sostenible? Según la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), “ser sostenibles significa ser responsables con las nuevas generaciones, promover relaciones sociales sanas y evitar acabar con recursos que han tardado siglos en formarse. Es decir, conservar y proteger la naturaleza”. Pero esta tarea no es solo cosa de cada uno de nosotros, sino también de las empresas, que deben esforzarse por tener la capacidad de realizar sus actividades siendo tan consecuentes con su negocio como con la sociedad y el medio ambiente.
Los consumidores son cada vez más exigentes y conscientes del impacto que tiene el consumo, lo que les conduce a comprar productos y demandar servicios de empresas que estén comprometidas con el entorno. Es por eso que se ha incrementado la venta de artículos ecológicos, pero también las estrategias de mercado como el greenwashing (malas prácticas llevadas a cabo por algunas empresas que se presentan como marcas respetuosas con nuestro planeta aunque en verdad no lo sean).
Todos estamos de acuerdo en que vivimos en una era dónde se ha vuelto prioridad y urgencia absoluta enfocar nuestros esfuerzos en la sostenibilidad, para el bienestar común y el desarrollo. Sin embargo, de lo que quizá no estemos tan al tanto, es la relación directa que existe entre la sostenibilidad y el liderazgo femenino.
Aunque la conversación sobre la diversidad, inclusión y la igualdad de género es imprescindible durante todo el año, hoy queremos compartir el trabajo de Magalí Riera, doctora en Derecho y Directora Académica de Programas de Posgrado de EAE Madrid; Elena Bulmer, doctora en Biología; y Raquel Rodríguez, doctoranda en Ciencias de la Dirección y profesora de EAE Business School, sobre “El Liderazgo Sostenible Femenino en la Logística”.
Una mirada en profundidad al impacto del liderazgo sostenible en la industria logística española, en la que menos del 10% de los cargos directivos están ocupados por mujeres. Recalcando, nuevamente, que la igualdad de género debe ser un objetivo prioritario en cualquier empresa que aspire a la sostenibilidad, ya que existe una relación directa positiva entre el liderazgo sostenible y el liderazgo femenino.
Las mujeres directivas sacan mejores resultados que sus homólogos masculinos en competencias clave como inspirar y motivar a otros, establecer relaciones y colaborar y trabajar en equipo, una realidad constatada, entre otros, por la Harvard Business Review.
La aportación de la perspectiva femenina, en puestos de dirección, enriquece la estrategia empresarial, y, en consecuencia, aumenta el beneficio empresarial. También enriquece la multiculturalidad y la transversalidad.
A mayor porcentaje de mujeres en los órganos de toma de decisiones de las empresas, más medidas se adoptan para impulsar sensibilidad y generar un impacto social y medioambiental en la sociedad, algo que corrobora el informe Approaching the Future 2019, de Corporate Excellence - Centre of Reputation Leadership y Canvas Estrategias Sostenibles.
Un alto porcentaje de mujeres directivas han incorporado los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU) en las compañías que lideran e incluso identifican los prioritarios para su empresa y lo comunican de esta forma.
La inclusión de las mujeres en los debates sobre el clima conduce a una mejora en los resultados de los proyectos y políticas relacionados con el cambio climático.
El estudio también corrobora que, aunque ha crecido notablemente en los últimos años, la presencia de mujeres directivas en empresas (34% a nivel mundial y 20% en las empresas del Ibex-35) está lejos de corresponderse con el enorme impacto que pueden generar.
A nivel individual, tenemos la responsabilidad de aligerar la presión que estamos ejerciendo sobre el medio ambiente a través de decisiones pequeñas y conscientes que ayuden a luchar contra el cambio climático. Pero no solo eso, el cambio de paradigma y la concientización del consumidor incide con mucha presión en el mundo empresarial, exigiendo que las marcas sean cada vez más green/eco-friendly/conscientes. Esto da lugar al gran “shift” que vivimos actualmente hacia un modelo de vida más sostenible.
Está demostrado que introducir el objetivo de ser más sostenibles de forma integral y transversal en el ADN de una empresa como eje estratégico y como parte de su cultura empresarial incrementa su competitividad, aumenta sus beneficios económicos y mejora su reputación, convirtiéndola en una marca consolidada.
Así, más allá de tácticas y acciones concretas, el primer paso para toda empresa es asegurarse de que en el centro de su estrategia haya un liderazgo sostenible.