La logística verde, un reto para las empresas y una apuesta por el futuro.
06 de Agosto de 2018
06 de Agosto de 2018
La logística verde es la clave del futuro sostenible para Rosario Llerena y Alberto Marina, dos perfiles que comparten sus puntos de vista sobre la logística verde en la sección Generaciones de la revista Alumni 5 editada por EAE. El perfil junior del reportaje, Rosario Llerena, trabaja de asistente de Logística en Tradipacart y ha completado su formación con el Máster en Supply Chain Management and Logistics de EAE Business School. El senior es Alberto Marina, gestor de la cadena de operaciones en Ingenico Group y Máster en Dirección de Operaciones en EAE Business School. Rosario Llerena es ingeniera industrial y Alberto Marina es técnico especialista en electrónica de comunicaciones.
Uno de los aspectos tratados en la entrevista es la compatibilidad entre aspectos como el respeto al medio ambiente, el incremento en la emisión de gases de efecto invernadero y el impacto de la actividad empresarial. Cada vez son más las empresas que se preocupan por reducir el impacto de su actividad en el entorno natural. La logística empresarial influye enormemente en el medio ambiente, por ello, Marina y Llerena hablan de una logística verde que transforme los procesos productivos y lleve a cabo un uso racional y eficaz de los recursos. Rosario Llerena percibe una toma de conciencia en la sociedad sobre la escasez de los recursos naturales, la contaminación y la gestión de residuos. Por ello, las empresas que busquen ofrecer un valor añadido a través de sus procesos verdes, productos ecológicos, vehículos de bajas emisiones y energías renovables crearán una ventaja competitiva y serán más eficientes. "Considero que la logística verde es parte del nuevo enfoque de gestión porque impulsa innovaciones tecnológicas que ayudan a satisfacer la demanda de productos sostenibles. Es necesario crear conciencia sobre el daño que estamos causando en el medio ambiente por nuestras actividades" explica la asistente de logística en Tradipacart.
Las ventajas en el incremento de los programas de logística verde en las empresas son indudables. Tanto a nivel estratégico, se reutilizan los productos desechables que los clientes devuelven, como a nivel regulatorio, a través de un marco normativo proactivo que exige un cambio, como a nivel reputacional: la marca gana en valor e incrementa la satisfacción del cliente. Además, los beneficios también se encuentran a nivel operacional ya que se tiene un mayor control de los procesos con programas innovadores y se aumenta la eficiencia. Rosario Llerena habla de "retos" como apostar por una nueva estrategia que aporta la mayor visibilidad posible a la cadena de suministros y lograr que todos los trabajadores de una compañía, a todos los niveles, se sientan comprometidos con el proceso de mejora continua y sostenible.
Gracias a su trabajo en el departamento de logística Rosario Llerena conoce todas las áreas de la cadena de suministros. Tradipacart se dedica al sector del papel y se encarga de su manipulación desde los centros de procesamiento hasta la entrega al cliente final. "Esto me ha permitido tener una idea global de la cadena de suministros, los costes y el impacto de nuestra actividad buscando ser eficientes". Tarde o temprano la sociedad comenzará a exigir responsabilidad a las empresas y hay que estar preparados: "Tengo la firme creencia de que la responsabilidad social corporativa (RSC) y, en especial, aquello relacionado con el respeto al medio ambiente va a desempeñar una función muy importante en la elección que los consumidores". Es más, "tarde o temprano, la sociedad empezará a mirarnos y a exigir responsabilidad a las empresas y deberemos ser capaces de mostrar a la sociedad lo que hacemos si queremos ser los elegidos".
Alberto Marina trabaja en Ingenico Group, compañía que se encuentra en un proceso de modernización de procesos de gestión y análisis en distintas cadenas de suministros para adaptarse a los múltiples comportamientos de compra de sus clientes. "Mi equipo se encarga de gestionar desde la planificación de la producción con la fábrica hasta la entrega al cliente y la retirada del equipo una vez terminado su ciclo de vida, por lo que el impacto que tenemos es muy importante". Sus principales retos en el día a día consisten en satisfacer las necesidades del cliente de la forma más eficiente posible. Para ello recurren a nuevas herramientas de análisis y estudio de nuevas tendencias y tecnologías. Un trabajo que requiere estar informado de los avances que vayan surgiendo durante las 24 horas del día. Estos son sus objetivos a corto plazo: "durante el próximo año, empezaremos a tomar datos sobre la huella de carbono que dejamos en la gestión de nuestra logística y plantearnos objetivos ambiciosos de reducción de la misma".
El medio ambiente, las materias primas y los cambios en las necesidades del consumidor auguran cambios que afectan directamente en la logística, que debe ser "flexible, ágil y, además, verde". Para conseguir este equilibrio, Alberto Marina, menciona el apoyo de los gobiernos para "apoyar esta transformación de la logística verde o, al menos, no dificultarla, en la actualidad no existen ayudas en este sentido. No las hay ni se las espera. Desde mi opinión, me conformo con que no nos pongan dificultades como el impuesto al sol".
El reto para las empresas que quieran ser elegidas por los consumidores consiste para Marina en demostrar a la sociedad que tienen los mismos objetivos de respeto, no sólo al medio ambiente, sino hacia la sociedad y sus valores como el respeto a los derechos humanos, a los trabajadores o a la igualdad entre hombres y mujeres. Porque la apuesta por el green logistics va a estar integrada en la estrategia empresarial de las organizaciones que pretendan llegar a sus clientes.
+ Aquí puedes leer y consultar la entrevista en su versión ampliada