17 de Enero de 2017
Por: Cristina Noguera, profesora del Executive MBA de EAE Business School
Apenas dos meses después de ser elegido en las urnas como nuevo presidente de los EE.UU, las primeras declaraciones del 45ª inquilino de la casa Blanca hace tambalear al mundo.
El anuncio de retirada de EE.UU del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), evidencia que la nueva etapa de la Administración Trump será especialmente difícil en el ámbito del comercio exterior y política económica.
Si bien aún no se conoce el alcance de esta decisión y la inmediatez de la misma, se evidencia que las políticas exteriores de la nueva Administración van a venir marcadas por un retorno al proteccionismo y restricciones severas en el comercio internacional.
Aún con cargo electo no será investido presidente hasta el próximo 20 de Enero- Trump anuncia los pilares básicos en los que estará sustentado su mandato.
Las primeras restricciones anunciadas se dirigen a las exportaciones chinas y mexicanas, para las que ya ha anunciado elevados aranceles para los productos que procedan de dichos países.
El sector automovilístico, es uno de los primeros afectados. Ford anuncia una marcha atrás a sus planes de inversión en México ante las trabas anunciadas por el presidente.
¿Existen precedentes en la aplicación de políticas similares en EE.UU?
Sí, el caso más reciente se remonta a 1930 con la aprobación del Arancel Smoot- Hawley, que pretendía la implantación de unas políticas restrictivas al libre comercio similares a las anunciadas por Trump.
Si bien inicialmente, la aprobación de dichos aranceles fue positiva a nivel nacional (contribuyeron a la creación de empleo, etc), tuvo un impacto muy negativo en su comercio exterior y sentó las bases para una etapa de recesión que aún se recuerda en los EE.UU.
¿Pueden las políticas proteccionistas de Trump ser una amenaza para el crecimiento de Europa?
Lo cierto es que existe un cierto "miedo" compartido en los distintos organismos de la Unión Europea, ya que las políticas del "American First" de Trump no sólo podrían frenar el crecimiento experimentado en los últimos meses, sino que incluso, podrían llegar a revertirlo.
En el ámbito bursátil, de momento, las bolsas continúan a la expectativa de conocer mayores detalles de dichas políticas.
En el caso de España, el impacto de dichas políticas restrictivas en el comercio y concretamente en materia de exportaciones, apenas tendría impacto. La mayoría (70%) de las exportaciones que se realizan desde España, tienen como destino países de la Unión Europea, mientras que apenas un 4% tiene como destino EE.UU.
Los más afectados en este sentido parecen ser los países latinoamericanos y asiáticos, localizaciones que han absorbido gran parte del tejido industrial de EEUU en los últimos años buscando un ajuste en los costes y que Trump parece claramente querer devolver a su origen.
Lo que parece quedar claro es que se abre una etapa de incertidumbre en materia económica y comercial que comenzará a dilucidarse a partir del próximo día 20 de Enero, una vez que el nuevo inquilino de la Casa Blanca ocupe el cargo como presidente de los EE.UU de manera oficial.