Las ventajas de los trabajadores millenials en la empresa
04 de Mayo de 2017
04 de Mayo de 2017
Por: Noelia García, periodista de El Economista
La generación Y, la generación del milenio o millenials, son las personas nacidas entre 1980 y 2000, que se han criado al albur de Internet, la telefonía móvil y las redes sociales. Ellos son capaces de recoger las habilidades que son mucho más difíciles de procesar en sus compañeros de más edad. La tasa de absorción tecnológica es extraordinariamente rápida, algo que no puede ser ignorado. Sus códigos, sus valores y sus tiempos son distintos. Ostentan títulos universitarios, idiomas y una mentalidad más abierta. Gran parte de esta generación ha estado muy afectada por el paro y, por ello, han salido fuera para buscarse un futuro más esperanzador.
En el entorno labor, exigen que les dejen ser originales, y eso incluye su estilo personal de vestimenta con el que se sientan cómodos. Asimismo, prefieren los estilos de liderazgo "inclusivos" (jefes que los aprecian por su arduo trabajo, donde los jóvenes sean más participativos), un buen clima laboral (incluso, internacional), una marcada conciencia ambiental y social, se desenvuelven bien con el trabajo en equipo y soportan el estrés más fácilmente que el resto de generaciones. Cuentan con la capacidad de la multitarea, han desarrollado la útil herramienta de la compartimentación para lograr la máxima eficiencia, tienen grandes ambiciones y luchan para conseguirlas.
Para 2020 serán más del 50% de trabajadores y en 10 años se calcula que representarán más del 70% del mercado laboral. No obstante, hoy, los millenials están intrínsecamente más motivados para tener éxito, porque es importante para ellos, quieren trabajos desafiantes, empresas que les propongan un plan de carrera atractivo. Se adaptan rápidamente a la tecnología, son muy globales, son emprendedores y no tienen miedo a iniciar nuevos proyectos; están seguros que pronto encontrarán otro trabajo, e incluso mejor.
Otra de las ventajas es que están dispuestos a aceptar salarios más pequeños a cambio de flexibilidad (están trabajando constantemente contra el estancamiento y hacia nuevas formas de pensar), reconocimiento personal y felicidad. De hecho, según se desprende de 'Encuesta Millennials' realizada por Deloitte, esta generación considera que esa flexibilidad (tan deseada) mejora la productividad consiguiendo así mejores resultados financieros y fideliza a los empleados, aumentando también su bienestar personal y su salud. En muchas ocasiones, buscan empresas que permitan elegir horarios y que adopten el teletrabajo como una política laboral. En este mismo sentido, en aquellas empresas que no existen acuerdos de flexibilidad, el número de millennials que se ven abandonando el empleo en dos años asciende a un 45%, cifra que se reduce hasta un 35% en aquellas más permisivas.
El talento de esta generación se caracteriza también por su autogestión y autoformación, en muchas ocasiones, aprenden por ellos mismos, de forma autodidacta y eso les lleva a una constante actualización. Son colaborativos, les gusta trabajar en equipo, no creen en las jerarquías y son más líderes que gerentes. Aportan a las empresas ideas frescas e innovadoras, su amplia red de información hace que puedan aportar una visión más global al proyecto (cine, música, estética, viajes, etc).
Asimismo, Accenture, en uno de sus informes, declara que los jóvenes que nacieron en estos años tienden a confiar menos en las personas que las generaciones anteriores, son más independientes y ya forman el grupo con mayor descontento político y religioso de los últimos 25 años.
Por último, la generación Y cree que la siguiente generación (Gen Z, quienes tienen 18 años o menos) tendrá un impacto mayor en la sociedad y estarán más preparados para el mundo globalizado. De esta manera, si los directivos del presente no adoptan estrategias efectivas para atraer y retener ese talento del millenial, van a perder una gran oportunidad para ser más competitivos en un entorno donde la innovación y la agilidad son la clave.