Los ingresos del comercio electrónico en el sector farmacéutico y el cuidado personal habrán aumentado un 52,6% en 2023
11 de Noviembre de 2019
11 de Noviembre de 2019
EAE Business School ha publicado el estudio Gasto Farmacéutico & e-health 2018 en el que se hace un análisis de la evolución internacional y situación actual del sector, con especial énfasis en e-health, un sector en expansión. Del estudio se extrae que desde el año 2013 hasta el 2018, el gasto farmacéutico público en recetas dispensadas en el Sistema Nacional de Salud ha experimentado un aumento del 14% recuperando parte de la caída que se registró durante la crisis. Sin embargo, el dato del 2018 (10.476 millones de euros) es todavía inferior al del 2011 cuando se registraba un total de 11.135 millones de euros.
“La tendencia de contención del gasto que tuvo lugar durante la crisis empieza a dejar de tener efecto con lo que las medidas implementadas en ese momento (genéricos...) no son suficientes para lograr la contención actualmente. El crecimiento se debe dos efectos: aumento del precio medio por receta y aumento del volumen de fármacos”, apunta el profesor de EAE Business School y autor del estudio, Rafael Fraile.
Por comunidades autónomas, Andalucía (10,63 € precio medio por receta) y Cataluña (10,74 € precio medio por receta) son las que menos gastan por receta; mientras que País Vasco (13,01 € precio medio por receta) y Cantabria (12,9 € precio medio por receta) las que presentan un gasto mayor. “Cabe señalar que la diferencia en el gasto por receta puede ser superior al 25%. Estas diferencias se explican por el hecho de que el conjunto de medicamentos cubierto por cada autonomía difiere”, explica el autor del estudio de EAE.
GASTO FARMACÉUTICO EL MUNDO
Por otro lado, en un marco internacional, el gasto medio farmacéutico de los países de la OCDE permanece en el 8,8% desde 2013. Los países en vías de desarrollo presentan porcentajes del gasto farmacéutico inferiores a dicha media y los países más desarrollados presentan valores del gasto superiores a la media, destacando en este sentido en el último año Estados Unidos (19,9%), Suiza (12,2%), Francia y Alemania (ambos 11,2%).
Por su parte, España se sitúa en la media de la OCDE con un peso de 8,9% y con una ligera disminución, entre 1 y 2 décimas, en los últimos cuatro años. En relación al gasto público en medicamentos, material y otros farmacéuticos, España, es el país de la Unión Europea donde el porcentaje de gasto público es menor, con un 70,5% del PIB, sólo por detrás de Portugal y Grecia.
“Este hecho puede resultar sorprendente si se tiene en cuenta que la idea existente es que en España la cobertura pública es de las más elevadas. Hay que considerar el grado de productos médicos que se consumen sin receta médica en España (automedicación) que pueden hacer que el porcentaje de gasto público sea menor del que cabría suponer”, explica el autor del estudio, el profesor de EAE Business School, Rafael Fraile.
EL E-HEALTH
El e-health hace referencia a áreas tan diversas como la Historia Clínica Electrónica (HCE), la telesalud, teleasistencia, los dispositivos móviles que permiten el seguimiento y el control de parámetros fisiológicos. “Es un sector en expansión, que en los últimos tres años ha doblado su tamaño debido al crecimiento de los dispositivos móviles, el envejecimiento de la población, la escasez de profesionales sanitarios y la necesidad de mejorar la atención”, señala Fraile.
Sin embargo, España todavía se encuentra en los inicios del uso de dispositivos sanitarios digitales. El 80% de la población no los ha usado nunca y, de los que lo usan, el 80% está relacionado con el deporte o actividades de ejercicio físico; el 21% nutrición; el 20% control de la medicación, entre otros. Las barreras principales para el uso de estos dispositivos son su coste (28%) y la falta de conocimiento (26%).
Por otro lado, existen principalmente dos barreras para la implantación de los sistemas de salud digital: la privacidad de los datos personales y los riesgos de ciberseguridad y los aspectos técnicos y normativos como la fiabilidad de los datos, la falta de infraestructuras y la heterogeneidad de datos.
En el 2018, en España, había menos de 9 millones de usuarios del comercio electrónico en el sector farmacéutico y un 71% no había comprado online estos productos.
En 2018 en España hay menos de 9 millones de usuarios y un 71% de la población no ha hecho nunca uso de estos servicios. Según el estudio, en el 2023 se espera que la cifra de ingresos prácticamente duplique la del 2017 con crecimientos muy elevados, tanto en el número de usuarios como en el ingreso por usuario. Respecto a 2019, en 2023, los ingresos del comercio electrónico en el sector farmacéutico y el cuidado personal habrán aumentado un 52,6 %. El número de usuarios en el sector farmacéutico y de cuidado personal online habrán aumentado un 43,6% en 2023 respecto a 2019, según el estudio.