Metodologías ágiles: cómo sacarle el mejor provecho
27 de Marzo de 2020
27 de Marzo de 2020
“La agilidad es un conjunto de principios y prácticas que crean un cambio profundo, movilizando las organizaciones y a sus integrantes”.
La gestión de proyectos ágiles ha recibido una atención extraordinaria en los últimos años como resultado de la necesidad de flexibilidad e innovación constante. Nuestro entorno de trabajo está lleno de desafíos, con información incierta y compleja, por lo que necesitamos las mejores prácticas para hacer frente a esta situación. A continuación, te presentamos 5 consejos que ayudarán a sacar mayor provecho de las metodologías ágiles.
La agilidad es un conjunto de principios y prácticas que crean un cambio profundo, movilizan a las organizaciones (y a todas las personas que las integran) para superar obstáculos, aprender constantemente, adaptarse y desarrollar nuevas capacidades para prosperar en entornos volátiles, complejos, competitivos y desafiantes donde hay respuestas fáciles.
1. Empiece a usar agile con el proyecto correcto
La implementación exitosa de estos métodos realmente requiere seleccionar los proyectos correctos para comenzar. Si nos equivocamos o tratamos de aplicar metodologías ágiles a proyectos claramente predictivos (donde tenemos compromisos de tiempo de entrega, restricciones de coste máximo, entregables 100% definidos), no obtendremos la capacidad de predicción y control, y ponemos en peligro ese compromiso contractual.
En cambio, los proyectos experimentales, internos, en los que tenemos un alcance menos definido, o altamente cambiante, y no hay compromisos preestablecidos, proporcionan un entorno ideal para la aplicación de metodologías ágiles que tratarán de extraer el máximo valor al tiempo invertido por un equipo autogestionado.
2. La estimación del esfuerzo es clave
Uno de los problemas más comunes al implementar metodologías ágiles es creer que ya no es necesario realizar estimaciones. Aunque, efectivamente, no es necesario hacer una estimación de todo el proyecto (y podemos centrarnos en las tareas del próximo sprint), es importante estimar de manera realista los esfuerzos necesarios para las tareas.
Si una tarea no se ha completado al final de un sprint o una tarea se muestra constantemente como en curso en un proyecto Kanban, es muy probable que hayamos cometido un error en nuestra estimación que debería corregirse. La tarea debería ser desglosada en partes más manejables y nuestros compromisos deberían revisarse.
3. Mida la velocidad del equipo
La velocidad es una medida de la cantidad de trabajo que un equipo puede abordar durante un solo sprint, y es una de las métricas clave en desarrollos ágiles. La velocidad se calcula al final del sprint , mediante la suma de los puntos de todas las historias de usuario completadas. Al igual que sucedía con el esfuerzo, para poder tener éxito en un entorno ágil, debemos tener una medida de esta velocidad, ni que sea aproximada.
4. No olvide la calidad
Aumentar las velocidades de entrega, mejorar nuestro producto a cada sprint o tener un equipo autogestionado no significa dejar de lado la calidad. Es muy importante entregar productos rápidamente en metodologías ágiles, pero esos productos también deberán funcionar… No deje la calidad hasta el final e incorpore aspectos de validación, revisión y medición en todos los entregables y productos que genere durante el proyecto desde el principio.
5. Gestione expectativas
Hay organizaciones que se embarcan en el camino ágil porque creen que todos sus problemas se resolverán como por arte de magia. Ya no habrá que planear ni documentar y, por lo tanto, el equipo irá generando producto con valor máximo en mínimo tiempo… Las metodologías ágiles se adaptan muy bien a entornos cambiantes, pero no son la solución a todos los problemas e implican cambios de procesos y, en el fondo, cambios culturales. Gestionar las expectativas de los equipos, clientes y directivos es importante para una implementación exitosa.
-- Este artículo ha sido redactado por Marc Bara, Director del Máster de Project Management de EAE y ha sido publicado originalmente en la revista de EAE, Talent Alumni Review --