Cómo impacta el ‘low code’ y el ‘no code’ en la creación de nuevas empresas
18 de Octubre de 2022
18 de Octubre de 2022
Cuando hablamos de “código”, podríamos decir que hacemos referencia, casi directa, a la “tecnología”. Concepto que hoy inunda nuestras vidas, la manera en que nos relacionamos, nos educamos y la manera en desarrollar negocios y nuevos mercados.
La transformación digital de la que estamos siendo testigos, necesita cada vez más capital (humano y técnico, sobre todo, por encima de la inversión económica) y en menos tiempo, para poder crear productos y servicios con un alto valor agregado, de rápida adaptación a los cambios.
¿Qué entendemos por low code y no code?
El low code es una modalidad de desarrollo de software que permite programar aplicaciones de manera rápida con un mínimo de codificación y que funciona a través de una interfaz visual simple y lista para usar. Por otro lado, el no code, que suele confundirse y compararse con el anterior, es otra modalidad de desarrollo de software todavía más sencilla, ya que no se requiere conocimientos técnicos para llevarla a cabo.
Éstas plataformas (con poca o nula necesidad de ser capaz de escribir código computacional), llegan para apoyar y facilitar estos procesos de cambio y crecimiento.
Lo que este enfoque plantea es priorizar la entrega rápida y constante de productos tecnológicos, adaptables a las necesidades del negocio, sin la necesidad de áreas de desarrollo de fuerte inversión.
El código en sí se ha logrado simplificar en una serie de paneles gráficos, configuraciones y definiciones de consultas en bases de datos, para crear aplicaciones y soluciones de manera rápida, adaptable y que satisfagan una parte puntual de todo un proceso de negocio.
Esto permite comenzar a pensar y modelar empresas, desde sus comienzos, teniendo en cuenta la solidez, la automatización y el control que los procesos que generan valor al negocio deben tener.
Sostenido en tecnologías en la nube, de fácil escalabilidad y contratación, el costo que representa la parte tecnológica del negocio deja de ser un ancla que pueda hundir fácilmente un proyecto o una inversión.
Además, la reducción en las barreras de entrada para el desarrollo de tecnología permite que, personas con experiencia en negocios, y con ciertos conocimientos básicos de informática, Excel y datos, puedan desarrollar aplicaciones y productos propios.
Plataformas para nuevas empresas
Si bien esta tendencia se visualiza sobre todo en nuevas empresas tecnológicas, el Low/No Code, puede ser una muy buena alternativa para las empresas grandes o con muchos años de recorrido para lograr dar un salto importante en la transformación digital de sus actividades.
Hoy en día, las empresas deben adaptarse a las nuevas formas de trabajar (desde la oficina o desde casa), a los equipos y a las nuevas metodologías para administrar proyectos y operaciones. Estas soluciones permiten medir, controlar, gestionar y modificar las operaciones de las empresas.
Los cambios son positivos, la posibilidad de iterar constantemente, sin depender del equipo de TI o desarrollo de la empresa, permite perfilar productos y servicios en mercados cada vez más cambiantes y complejos. Esta situación invita a las empresas a poder encontrar nuevos nichos de mercado.
Pensar en desarrollar una aplicación, un Marketplace o un modelo de negocios que busque satisfacer un núcleo reducido pero potente de clientes, no es algo imposible. La situación actual, permite bajar los umbrales de inversión económica inicial y desarrollo tecnológico. La estructura y los costos, se reducen por la automatización.
Cuando los negocios comienzan a rodar, las operaciones cogen un volumen alto de transacciones o las necesidades de control y seguridad de datos se vuelven mayores, siempre es recomendable pasar a procesos de desarrollo tecnológico más robustos.
Acceder a desarrollar con plataformas low code, puede ayudar con aplicaciones, proyectos y desarrollos rápidos o bien pequeños, pero las estructuras de base, en caso de crecer o expandirse deberán ser más potentes.
Si bien se parte de una leve capa de código que puede expandirse o complementarse con otros desarrollos, es recomendable evitar las dependencias de proveedores, el descontrol en las bases donde alojamos datos y de no tener el dominio de la seguridad del sistema.
Las herramientas más útiles para el low/no code
Para poder llevar a cabo la programación de éstas plataformas, hay herramientas que nos facilitan el trabajo. Entre ellas, destacan:
Está claro que, en los próximos años, una buena parte de las empresas que hoy ya transitan procesos de evolución a lo digital, se apoyarán masivamente en este tipo de plataformas. La rapidez para implementar nuevas soluciones, tableros de mando y automatización en las operaciones, serán la clave para transformar ideas en nuevos modelos o líneas de negocio.